venerdì 29 settembre 2017

Krugovi (Circles) - Srdan Golubovic

un altro film che delle sale italiane non ha conosciuto l'odore (e neanche delle tv, immagino).
una storia difficile, in una terra difficile, con gente che si è odiata fino alla morte.
una storia di sopravvissuti, che vivono ogni secondo la cattiveria e la crudeltà del passato, con un dolore e un rancore che sembrano eterni.
non servono molte parole, contano le azioni, come sempre, e qui ancora di più.
non aggiungo altro, solo che è un gioiellino, peccato non guardarlo - Ismaele





The performances of the lead actors give the film extraordinary gravitas. Particularly noteworthy is Leon Lucev as Haris. Lucev’s storyline is the most overtly dramatic of the three, and he does a terrific job conveying Haris’s beleaguered stoicism. Aleksandar Bercek also gives a great performance as Ranko, the laconic old man haunted by the incident. Not one of the characters in this movie is histrionic—they’ve all been through too much trauma and hardship to allow themselves obvious emotion. And yet, within their flattened affective register, each of the actors manages to give a nuanced and thoroughly convincing performance. The movie manages to evoke strong emotions in the audience without showing them in the characters, and even does so while withholding vital information. Few films are this confident in their storytelling. While the fact that it is a relatively small-budget Serbian film will unfortunately most likely prevent it from finding a wide American audience, Krugovi is a film that deserves to be seen purely on the strength of its story and characters.

…El talento de Golubovic no pasa solo por haber tomado una historia interesante, o una idea interesante, y haberlas combinado de manera prodigiosa, haciendo uso de un poderoso lenguaje cinematográfico para transmitirlas. Tampoco por ir alternando las tres historias sin que ninguna pierda intensidad en relación a las otras. Mucho menos, por ahondar en otros casos de circularidad (que un personaje sea golpeado al inicio y casi al final, o que otro retorne a Trebinje, su ciudad de origen). Su mayor logro es sembrar incógnitas constantemente. El espectador va construyendo la historia a lo largo de cien minutos de película, nada se explicita en ningún momento. Los personajes no cuentan en ningún momento lo que sucedió, porque no sería verosímil que unos protagonistas relataran el pasado a otros. No hay necesidad de referir algo que todos conocen y que eventualmente prefieren olvidar. Golubovic consigue hacer partícipe al espectador de la historia mediante recursos alternativos a las palabras: la emoción, los sentimientos, los pequeños gestos, algún mínimo guiño humorístico. Circles se convierte en un intenso drama donde las palabras y los hechos se entrelazan en algo tan complejo como lo es la historia. Es mucho más que un simple trabajo sobre la redención: se trata de una obra humana, sobre el deber, el amor, la culpa, el perdón, hecha a la medida de grandes espectadores y erigiéndose como producción ejemplar sobre las consecuencias de la guerra y la intolerancia.

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